No cabe duda de que Hozumi es una de las autoras mejor valoradas de nuestro catálogo, y resulta todo un orgullo para esta casa poder editar sus deliciosas obras. Con motivo de la publicación de su manga más reciente, Mi Giovanni, repasamos su trayectoria y esos títulos con los que nos ha cautivado.
Bajo el seudónimo Hozumi encontramos a una autora de la que se conocen pocos datos personales. A duras penas sabemos que nació un 28 de octubre en cierta zona montañosa de la prefectura de Kanagawa, que su signo del zodíaco es, en consecuencia, Escorpio, que se declara fan del humorista Sanma-san así como de la apasionada música a guitarra del dúo mexicano Rodrigo y Gabriela, y que le pirra el genmaicha (té verde mezclado con arroz integral tostado). Ahora bien, lo que sí conocemos al dedillo es su trayectoria profesional. Su carrera arranca en 2010, cuando gana el Premio Silver Flower que organiza la revista Flowers de Shôgakukan con la historia corta La víspera de la boda, que aquel otoño aparecerá en el correspondiente número especial de la revista. A partir de entonces, publica varias historias cortas a caballo entre la revista Flowers y la edición especial cuatrimestral de esta, llamada Rinka. Finalmente, tras realizar en septiembre de 2012 una nueva versión de La víspera de la boda con algunos retoques respecto a la original, llega a los puntos de venta su primer tomo, titulado como ese delicado relato que le había abierto las puertas del mundo editorial. Recibe críticas magníficas, que destacan la gran sensibilidad con que toca los temas centrales de las distintas historias, de carácter intimista, y el volumen alcanza puestos muy altos en diferentes listas de mangas recomendados –que en Japón suelen tener bastante relevancia–, algo que se repetirá con sus posteriores creaciones.
Su siguiente obra es Sayonara, Sorcier (2013), un drama en dos volúmenes protagonizado por el marchante de arte Theo Van Gogh y su célebre hermano, el genial pintor neerlandés Vincent. Usando como base elementos cogidos de la amplia correspondencia entre ambos y con intención de mostrar asimismo el cambio en la concepción del arte que se estaba produciendo en la Francia de la época, Hozumi relata algunos de los momentos clave en la vida de los hermanos, especialmente de su relación, si bien se toma varias licencias para dotar a la obra de mayor impacto. Como curiosidad, este manga no solo resulta un gran éxito de crítica en Japón, sino que también da el salto a los teatros... ¡con un musical! A continuación, la mangaka desarrolla La posada de los objetos perdidos (2014-2015), que adopta su título del lugar al que van a parar las personas que han olvidado algo que resulta esencial para ellas. En esa posada las recibe una joven misteriosa que les da las claves para encontrar lo perdido y que puedan seguir adelante. La sensibilidad y delicadeza que ya había mostrado en las historias de La víspera de la boda encuentran continuidad sobradamente en este manga de 3 volúmenes que reflexiona sobre la vida, la muerte, los recuerdos y la importancia de las pequeñas cosas.
Y así llegamos a Mi Giovanni, su última obra. Entre 2016 y 2018, Hozumi serializó esta historia de amistad y rivalidad entre dos violonchelistas, Tetsuo e Ikumi, desde que se conocen en la niñez. En ella realiza un retrato bastante realista de lo que supone formar parte del mundo de la música: el talento natural frente al esfuerzo constante, la lealtad frente a la competitividad, la relación entre maestro y discípulo, la pasión, los miedos... Formado por 5 tomos, se trata de la obra más larga de la autora hasta la fecha, y una nueva muestra de su maestría a la hora de construir personajes de elaborada personalidad que, ya sea de modo explícito o sutil, muestran su lado más personal (amor, tristeza, alegría, dolor, pérdida...) y pugnan por alcanzar la felicidad en una vida imperfecta.
Aparte de estas cuatro obras, todas ellas publicadas en castellano, cabe destacar la participación de la dibujante en el tomo colectivo Kimi ga tonari ni iru yo dake de –Ai subeki dôbutsutachi–, un recopilatorio de historias cortas de distintas autoras sobre la relación entre humanos y animales, en el que hay nombres de la talla de Est Em (Golondrina), Keiko Nishi (Promesa) o Chie Shinohara (Academia de mangaka: Shôjo). La participación de Hozumi, sin embargo, no es un relato original, sino Y entonces..., la historia protagonizada por un gato que cierra el tomo La víspera de la boda. Lo que permanece inédito, ya que no se ha recopilado por ahora en Japón, es Izakaya Sachiko, de tres capítulos, en el que un chico abandona un trabajo estable que no le llena y, mientras busca su lugar en el mundo, entra a trabajar en una tasca japonesa, donde se relacionará con clientes variopintos que le ayudarán a encontrar su destino.
Para nosotros, Hozumi es una de las mangakas más interesantes del panorama actual, no solo por lo preciosista de su dibujo, sino sobre todo por ser capaz de contar historias con un pulso narrativo y emocional al alcance de muy pocos autores pese a llevar tan solo una década como profesional. Por eso, si todavía no has sucumbido a sus encantos, te recomendamos fervorosamente que pruebes alguno de sus títulos. No importa cuál elijas: es probable que tras leerlo, enseguida, casi sin darte cuenta, te hagas con los demás. Porque Hozumi te atrapa. Palabrita de Milky Way.